póliza de seguros de empresa

Protege tu negocio: Revisa tu póliza de seguros de empresa

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Hiscox España
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Uno de los mejores ejercicios para saber que la póliza de empresa que tenemos contratada sigue cubriendo los diferentes riesgos a los que nos enfrentamos en el día a día es revisarla de manera periódica. De esta forma se conoce si las coberturas que contratamos siguen sirviendo. 

Desde Hiscox te hablamos sobre la importancia de revisar la póliza de seguros de tu empresa de forma periódica

La necesidad de revisar los seguros 

La mayoría de nosotros contamos con un seguro de hogar, de coches, de empresa… Y una vez lo tenemos contratado, nos olvidamos de él, ya que al renovarse periódicamente creemos que no va a haber ningún problema. Pero esto es una equivocación, ya que durante la vida ocurren diversas situaciones, pero las coberturas, al ser siempre las mismas, pueden no protegernos en caso de necesitarlo. De ahí, la importancia de que, en primer lugar, contrates una póliza adecuada a tus necesidades y, en segundo lugar, la tengas actualizada para que no haya ninguna sorpresa que te deje desprotegido. 

Está claro que a final de año siempre hacemos balance, preguntándonos qué cosas, tanto buenas como malas, han ocurrido qué es aquello en lo que nos gustaría mejorar. Además, están los famosos propósitos para el año nuevo. Entre ellos, debemos incluir la revisión del seguro, detectando coberturas nuevas que puedan interesarnos o, por el contrario, algunas que han dejado de ser necesarias.

Eso sí, para tener un conocimiento más amplio y saber si se está haciendo lo correcto, lo mejor es contar con el apoyo de un corredor de seguros de confianza, ya que como asesor experto que es, te ayudará a cerciorarte de que las coberturas del seguro de tu empresa te cubren ante los riesgos y situaciones que pueden ocurrirte en el desempeño de tu profesión. 

Habrá ocasiones en las que todo quede según estaba, y otras, en las que tengas que que ampliar la póliza con coberturas específicas para tu situación de riesgo, aunque esto implique pagar un precio un poco más alto por tu seguro. Solo de esta forma tendrás la garantía de que, en caso de incidente, no disminuye tu protección ni tienes que hacer frente a pérdidas económicas.  

¿Cuándo hay que revisar la póliza de tu seguro de empresa?

Desde Hiscox exponemos una serie de situaciones en las que es recomendable revisar tu seguro de empresa. 

Una vez al año para prevenir 

Al igual que tu coche pasa por la ITV, te haces una revisión médica o unos análisis de sangre, con el seguro pasa igual. Para prevenir tu desprotección, revisa tu póliza una vez al año. Si cuentas ya con un seguro, comprueba que cuentas con las coberturas adecuadas antes de su vencimiento y su próxima renovación. 

Remodelación del establecimiento o mudanza

A la hora de realizar obras en tu establecimiento o local, puede ocurrir que suba el coste de reemplazo. 

En cuanto a las mudanzas, siempre existen situaciones en las que necesites un asesoramiento correcto. 

Respecto a las mudanzas pueden ocurrir dos situaciones: 

  • En caso de que decidas mudarte a un local más pequeño, seguramente es mejor que cambies tu seguro para no pagar de más, pues puede ocurrir que el pago que realizas actualmente sea excesivo. 
  • Si lo que haces es mudarte a un establecimiento más grande por falta de espacio, ocurrirá lo contrario y la cantidad a pagar será mayor, ya que tu seguro será insuficiente. 

En ambas situaciones, cuenta con la ayuda del asesor experto para que te guíe. 

Comienzo de un negocio

Otro caso es que decidas iniciar tu propio negocio. Aquí, una de las cosas que tendrás que hacer es analizar todos los riesgos que pueden ocurrir por desempeñar dicha actividad empresarial en un espacio físico. Además deberás saber cuáles son las coberturas necesarias para tu mayor protección, la de tu equipo de trabajo y empresa. 

Si lo tuyo es el teletrabajo, debes revisar qué coberturas del seguro te cubren a ti y a tu equipamiento. 

Modificación en la normativa

Las leyes y regulaciones no están exentas de cambio, por lo que revisar tu seguro de empresa te permitirá saber si estás al día con la normativa vigente. 

Transformación del entorno empresarial

El mundo de los negocios cambia y se transforma continuamente, lo que implica que siempre haya nuevos riesgos, actualizaciones y desafíos. Un ejemplo son los fallos en el sistema informático, lo que puede provocar graves consecuencias a trabajadores y clientes. Para protegerte de estas pérdidas, deberás contar con un seguro que cuente con coberturas tecnológicas e informáticas. 

Funciones del corredor de seguros 

Un corredor de seguros es un asesor experto que se encarga de confirmar al cliente que los riesgos a los que está expuesto se encuentran cubiertos por la póliza que tiene contratada.  Como profesional especializado que es, debe saber intermediar y asesorar en todo lo relacionado con sus seguros.

Un buen corredor de seguros cuenta con los siguientes requisitos: gran conocimiento sobre las regulaciones, leyes y normativa actuales, capacidad de evaluación de las necesidades de los clientes y búsqueda de seguros que se adecúen a ellos, comparación de pólizas y diferenciación de los tipos de seguro que hay en el mercado. 

Entre sus funciones se destacan las siguientes: 

  • Actuar como intermediario entre la aseguradora y el asegurador. 
  • Ofrecer asesoramiento de forma profesional, imparcial e independiente. 
  • Informar a sus clientes de las pólizas que están interesados de contratar y teniendo en cuenta sus condiciones. 
  • Gestionar si ocurre algún siniestro.  

Protege a tu empresa del riesgo ante posibles incidentes y las correspondientes reclamaciones o pérdidas económicas con los seguros especializados de Hiscox

Con nosotros tendrás garantizada la seguridad y protección de tu negocio, ya que trabajamos para ofrecerte la solución que mejor se adecúe a tu caso. Por ejemplo, elige nuestro Seguro de Responsabilidad Civil Profesional para proteger tu negocio frente a reclamaciones de tus clientes disconformes con el trabajo o servicio realizado, garantizando que tienes cubiertos, entre otros, los gastos legales para tu defensa.